Susúrrame al oído que me odias
mientras tiemblo entre tus piernas como un tonto.
Araña bien mi espalda, como una loca.
Acabemos este baile, y luego otro.
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Me estremezco, me desatas, te lamentas;
se me lía tu melena en las caderas.
Me enrollo, me deshago, me envenenas
se te enreda mi melena entre los dedos.
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Me derramo torpemente en tu regazo,
me derrito en un bostezo alegremente.
Me acaricias, me levantas y nuevamente,
aparezco envenenado entre tus muslos.
Amigo inesperado e inquietante, de tosco paladar, inconveniente.
Me mimas cuidadoso e insolente, rumiando mis palabras a lo hondo.
Amigo indeseado, impertinente.
Me atrapas en tu mano y tu veneno. Revuelves mi almohada y mis entrañas.
Me enredas, me enloqueces y no crezco.
Quiero follarte fuera de contexto,
en la escalera, en la azotea indiscreta de esa torre.
Quiero que me arrojes, osada,
contra el mármol incorrupto de un museo, contra el césped mentiroso del jardín.
Voy a prenderme, incoherente, de tus bragas.
Voy a perderme, decadente, por tus muslos.
Quiero que me atrapes, desquiciada,
sobre el mantel irrespetuoso de aquel púlpito, contra la arena sobrante de esa obra.
¿Quieres follarme fuera de pretextos?
Voy a escribirte, irreverente, en 1000 palabras.
Voy a vestirte, delirada, en mis caricias.
Fotografía de Sweetdindi Sweet [Síguela en http://flic.kr/p/qNoZUb]Suspira lenta, pero apresuradamente. Vacía el pulmón y acaricia con tus ojos su mejilla.
Manosea libremente su entrespalda y palpa casi sin querer su cuerpo.
Suspira, ahora, con más ansia, casi landra de un sollozo y de una risa.
Si puedes húyete de un solo giro y, al irte, suspira ya sin miedo y con más ganas.
Con lo bien que hacía tu cama
lo mal que me hago la mía,
que hasta el sueño se me enfría
y se me quitan las ganas
de soñarte hasta mañana,
de dibujarte dormido,
de ser esclavo y cautivo
de esa esperanza forzada
que me amarra a tu mirada
y me encadena a tu olvido.
*esta décima está alterada porque hay rimas que no son consonantes, espero que me disculpéis.
Las horas, el destino, tus miradas.
Viendo pasar personas y contornos.
Demonios, infrahombres, mujeronas.
Viendo caminar sin alas y con prisas.
Poetas, carpinteros, adivinos.
Viendo volar con alas y sin prisas.
Salpicaduras, envoltorios, lagrimitas.
Viendo la huida de los otros, de los míos.
Sin palabras, sin sonidos, con angustia.
Estamos tardando en tomar un café, un vino, una palabra.
Estamos tardando en tomarnos la mano y ver al viento marearse.
Tardamos ya, que lo sepas, en hablar de cómo vamos a llamarnos.
Estamos tardando ya, lo sabes, en besarnos.
Quizá el camino hubiera sido más tranquilo.
Las pausas, más pausadas y más lentas.
Los tiempos, menos rotos y menos tristes.
Quizás mi cama hubiera sido más pequeña,
más caliente, más humana, más tu nombre.
Podríamos haber inventado diez mentiras,
repetirlas cada día de diez maneras.
Podríamos haber creado cualquier mundo
y caminar de la mano en el embuste.
Podríamos no haber sido tan sinceros.
Podríamos habernos NO querido para siempre.
Me ilusionan las lunas y los nones, las casas delirantes y enredadas.
Me entusiasman el negro y los colores, las manos que se manchan de pintura.
Me lastiman los verbos traicioneros, me revuelven las tripas, me envenenan.
Me encantan los magos y las brujas, sus trucos, sus conjuros, sus verrugas…
Me fascina imaginarme en algún cuento, ser un duende, ser un hada o ser un ogro.
Me dibujo siendo aquel animalito, el piojo en la cabeza de Rapunzel.